En Kukoa trabajamos con metodologías flexibles, iterativas y eficientes para poder entregar valor al cliente según las necesidades específicas para sus usuarios, es por ello que los primeros pasos siempre deben ir orientados a enfocar los objetivos de negocio.
El trabajo de asesoramiento en estrategia digital implica no sólo identificar las necesidades de los clientes, sino conocer que es valioso para ellos y, a partir de la experiencia de cliente, ir descubriendo el producto a desarrollar.
La metodología Lean UX no da tanto énfasis a los entregables, planificaciones secuenciales y documentación, como la tradicional metodología Waterfall, sino que orienta la validación del concepto mediante el aprendizaje y la mejora de las funcionalidades según las necesidades de los clientes. Es un cambio de mentalidad priorizando el aprendizaje del valor que nos ofrecen los clientes por delante del entregable, dado que sólo ellos tienen el conocimiento de lo que es necesario, al fin y al cabo son ellos quienes lo van a usar o comprar.
Diagrama del diseño iterativo y proceso de critica. Warfel, Todd Zaki. 2009.
Prototyping: A Practitioner’s Guide. New York: Rosenfeld Media.
Diseño de producto mediante MVP, Minimum Viable Product
Mediante el Producto Mínimo Viable podemos testear rápidamente el producto que vamos a desarrollar con los clientes finales, de éste modo podemos aprender que mejoras debemos realizar. El Producto Mínimo Viable (MVP, Minimum Viable Product) es aquello mínimo que necesitamos hacer para aprender lo siguiente más importante.
Debemos ser consientes de no malgastar recursos y esfuerzos en tareas que no tienen oportunidades de éxito. Con éste cambio de mentalidad y de cultura de trabajo los equipos trabajan mejor, los riesgos son menores y los productos mejoran el rendimiento.
Identificación de los puntos clave de valor para los clientes
Debemos identificar el problema o la mejora del negocio que tenemos que atacar y tener una visión a alto nivel del alcance, sin estar sujetos a la entrega de ningún producto cerrado ya que, a través del análisis de valor de los clientes, puede ser que la mejora del negocio se centre en una mejora de funcionalidades.
Pongamos por ejemplo una empresa que quiere mejorar la experiencia de compra de su producto en canales móviles. El planteamiento estratégico quizá no pase por desarrollar una aplicación móvil para incrementar las ventas de canales móviles, sino desarrollar una funcionalidad específica que tenga más impacto en los usuarios de dispositivos móviles. Quizá se cumpla con el objetivo de incremento de ventas en canales móviles, o quizá no, pero es el valor del aprendizaje lo más importante. En el peor de los casos se habrá invertido una parte menor del presupuesto en conocer mejor a los clientes sin tener que haber perdido tiempo y dinero diseñando una aplicación móvil.
El requerimiento es un resultado y objetivo
Los equipos de trabajo deben experimentar y aprender qué ideas son las que conducen el comportamiento de los clientes hacia una dirección particular y definir los requisitos para las ideas que conducen hacia el objetivo del negocio.
El alcance significa tiempo y coste, por lo que poder testear hipótesis de forma iterativa con el Producto Mínimo Viable permite la reorientación rápida de los objetivos que se van aprendiendo de los clientes. Por supuesto que hay que tener una visión a alto nivel del alcance pero en el sentido global: pequeño, mediano, large o XL.
¿Cómo mides el éxito en tu empresa?
¿Mides el éxito por el número trabajos realizados o por la calidad evaluada por clientes? Mayoritariamente las empresas basan sus bonus y retribuciones en realizar cualquier cosa para los clientes tanto si tiene valor como si no lo tiene, lamentablemente existe la percepción que entregar cosas es valioso. Por ello es necesario un cambio de mentalidad que se tiene que traducir en un cambio de metodología de trabajo.
Sal a hablar con los clientes, es la hora de la experiencia de cliente, debemos conocer aquello que es valioso para ellos, testear las hipótesis para saber si la dirección es correcta y a partir de los resultados aprender cómo construir el producto necesario para solventar el problema del negocio.
En Kukoa establecemos una relación para ir creciendo juntos
En Kukoa no trabajamos contigo, establecemos una relación en la que aprendemos de qué forma realizar el impacto más efectivo a tus clientes según sus necesidades y con la tecnología más innovadora. No sólo realizamos procesos de I+D+i y analizamos qué valor necesitan tus clientes, sino que también actuamos de forma proactiva ofreciendo mejoras continuas en todos los proyectos en los que estamos involucrados.
En nuestro proceso de desarrollo intervienen la observación, inducción e hipótesis para poder detectar aquello valioso para los clientes y aprender cómo mejorarlo para obtener un impacto mayor que tu competencia. Al fin y al cabo, estamos alineados estratégicamente con el plan de tu negocio y estamos en constante generación de ideas para mejorar la experiencia de cliente.
